viernes, 18 de julio de 2008

Firma de convenios con el Presidente de Lituania

viernes, 18 de julio de 2008
PALABRAS DE LA PRESIDENTA DE LA NACIÓN, CRISTINA FERNÁNDEZ DE KIRCHNER, EN LA FIRMA DE CONVENIOS CON EL PRESIDENTE DE LA REPUBLICA DE LITUANIA, VALDAS ADAMKUS.
Señor presidente de la República de Lituania, comitiva que lo acompaña: es para nosotros un gran honor, un inmenso placer recibir aquí en nuestro país a esta joven República que pronto cumplirá mil años, porque además de saludar su incorporación al mundo democrático, tal como nos contaba recién su Presidente con gran orgullo y felicidad, también nuestro país constituye un lugar importante para Lituania porque es precisamente aquí donde reside la segunda comunidad en importancia fuera de Lituania en todo el mundo. Tan importante es la comunidad que hasta tiene un intendente como Ricardo Ivoskus que es precisamente el intendente de San Martín, una importantísima localidad de la provincia de Buenos Aires, lo que revela el grado de integración.
En realidad es una característica distintiva de todas las corrientes migratorias que ha recepcionado nuestro país durante todo el siglo XIX, fines del siglo XIX fundamentalmente, y el siglo XX. Esto nos ha caracterizado por ser precisamente un país absolutamente amistoso, amigable, casi de madre, casi maternal, en esto de recibir a hombres y mujeres que durante fines del siglo XIX y fundamentalmente también el siglo XX, huyeron muchas veces de una Europa asolada por el hambre, la guerra, la miseria o el dolor.
Precisamente por eso le pedíamos al señor presidente de la República hace unos instantes, en la reunión que mantuvimos en privado, que intercediera ante sus pares de la Unión Europea; sabemos que Lituania no tiene el problema de la migración pero queremos que él interceda frente a otros países de la Unión Europea para que precisamente puedan revisar esa, cómo calificarla, odiosa comunicación en materia de política migratoria, que creo, como lo charlábamos hace unos instantes y coincidíamos, es vejatoria de dos cosas. Una de ellas, la más fuerte a mi criterio, la que más nos identifica a ambos, que es el hecho del compromiso irrestricto que uno debe tener con los derechos humanos, con las libertades, con el respeto y la tolerancia hacia el otro, que creo hacen a definirnos como ciudadanos universales a todos. Y la otra por supuesto, el hecho de que los países de la América del Sur siempre hemos recibido a los hermanos de otras latitudes con nuestros brazos abiertos.
Recién le contaba al Presidente que de mis cuatro abuelos tres son españoles y de los cuatro abuelos del anterior presidente de la República Argentina, dos eran croatas y los otros dos bisabuelos de origen suizo-alemán. Como usted verá Presidente, y lo charlábamos hace unos instantes, somos una comunidad en la cual tenemos profundas identidades y lazos con miembros de la Comunidad Europea.
Pero quiero pasar a las cosas que son buenas, que nos unen y que tenemos que profundizar, que creo que es precisamente nuestra relación comercial, nuestra relación cultural, en la que hoy hemos firmado importantes convenios. Sé que ha venido acompañado por una importante delegación de empresarios. Quiero contarle que este, mi país, ha experimentado un fuerte crecimiento, casi a tasas chinas durante los últimos cinco años, y que la última medición del mes de mayo ha sido del 8 por ciento de crecimiento de la actividad económica.
Quiero asimismo decirle que las inversiones en el primer semestre, comparadas en forma interanual con el primer semestre del año pasado, también han crecido un 72 por ciento y de ellas el 85 por ciento han sido precisamente anuncios de inversiones extranjeras. Hoy la Argentina es un excelente país para oportunidades de negocios, que esperamos realmente profundizar.
Finalmente, para terminar quiero recordar, en un día muy especial para los argentinos, que es un triste aniversario hoy 18 de julio. Lo recordamos juntos, él estuvo muy temprano por la mañana visitando a la comunidad judía, visitando la AMIA. Es un triste aniversario para los argentinos, nos hubiera gustado por allí recibirlo otro día, pero creo que al contrario, cuando pasan cosas como las que nos han pasado a los argentinos y cuando vivimos en un mundo tan asolado por las hostilidades y por la inseguridad me parece que tal vez el encuentro de países como el que hoy tenemos aquí es una buena señal para acordarnos de todas las cosas que nos unen, que nos hermanan, y todas las cosas que juntos tenemos que combatir todavía, como son la intolerancia y el terrorismo global.
Así que bienvenido a la República Argentina señor presidente de la República de Lituania, es un gusto tenerlo con nosotros, muchas gracias a usted por su presencia y a toda su comitiva. Muchas gracias

Palabras de la Presidenta de la Nación acto inaguración de obras en el aeropuerto de Resistencia


La Presidenta anuncia obras de infraestructura en el Aeropuerto de Resistencia

jueves, 17 de julio de 2008

PALABRAS DE LA PRESIDENTA DE LA NACIÓN, DRA. CRISTINA FERNÀNDEZ DE KIRCHNER, DURANTE EL ACTO DE INAUGURACIÓN DEL AEROPUERTO INTERNACIONAL DE RESISTENCIA, CHACO.

Gracias, muchas gracias Chaco; señor Gobernador de la provincia del Chaco, querido Jorge Capitanich; Sandra; querido Gildo Infrán, Gobernador de la maravillosa provincia de Formosa; señores empresarios; amigos y amigas: realmente estoy muy contenta de estar aquí, hoy inaugurando esta importantísima obra de aeropuerto, que dota a nuestra querida provincia del Chaco - como bien decía Jorge - de una infraestructura, en materia aeroportuaria de características internacionales; infraestructura - como bien decía también Ernesto Gutiérrez, que fue no solamente uno de los ejes de nuestra propuesta electoral, sino fundamentalmente la ejecución de estos casi más de cinco años de gestión ya, a partir del 25 de mayo de 2003, donde la infraestructura económica y social fueron puntales en un crecimiento económico, que pese a como dice "Coqui", a los agoreros y a los que siempre pronostican catástrofes y cataclismos sigue a paso firme. Este mayo, último que pasó, pese a todo y cuando digo pese a todo ustedes saben, por supuesto, de qué hablo, Argentina creció al 8 por ciento, casi un desafío para cierta clase de agoreros y de agentes económicos, que creen que el país solamente puede pertenecerle a unos pocos. (APLAUSOS)
Nosotras y nosotros estamos convencidos que la Argentina somos todos y fundamentalmente el esfuerzo debe estar orientado y destinado a generar trabajo, porque cuando uno también genera trabajo está generando salario. Y cuando genera salario vuelve a generar la capacidad para educarse, para vivir, para tener salud y para tener vivienda.
Y esta obra, que hoy estamos inaugurando, en la cual también tenemos participación el Estado Nacional, ustedes saben que el Estado Nacional participa en un 20 por ciento, se anuncia o inauguramos también en un día muy especial y muy vinculado a esto de la infraestructura aeroportuaria. Hoy Argentina ha comenzado el proceso de recuperación de su línea de bandera. (APLAUSOS). Quiero confesarles algo, en realidad no nos hubiera gustado que esto sucediera porque nos hubiera gustado que realmente los empresarios que tenían a su cargo la explotación de la empresa hubieran podido llevarla adelante con eficacia, con eficiencia, porque creemos en la gestión privada, en materia de servicios públicos y creemos que puede ser eficiente.
Pero lo cierto es que todos los argentinos, y sobre todo los argentinos del país federal, los argentinos que vivimos en el país profundo hemos sufrido el deterioro permanente de un servicio, que ha dejado de ser eso, lo que siempre debió haber sido: un servicio público. Por eso la decisión, en un marco de acuerdo, porque también es importante llevarlo a cabo en un marco en el cual podamos acordar una salida que construya o reconstruya nuevamente lo que, en un momento, fue orgullo para los argentinos. Aerolíneas Argentinas. Y queremos hacerlo con mucho cuidado, con mucho trabajo, con mucho esfuerzo, en una muy pronta puesta en valor de la empresa, para luego también con métodos licitatorios transparentes, a nivel nacional e internacional, aportar capital privado. Porque creemos muy firmemente en la articulación entre lo público y lo privado; hemos superado la etapa donde nos dijeron que el Estado no servía para nada y lo hemos superado con mucho esfuerzo y con mucha tragedia para muchos argentinos.
Ahora sabemos no solamente que el Estado sirve, sino que además es insustituible e indelegable su rol en la participación y el contralor de determinados servicios públicos. Y creo, lo hemos aprendido con fracasos, que a los argentinos muchas veces nos pasa que parece que no pudiéramos hacer aprendizaje como hacen otros países a partir de experiencias positivas; parece ser que muchas veces solo podemos hacer aprendizaje a partir de los fracasos. Esa debería se una tendencia que deberíamos todos tratar de cambiar, no tener que fracasar para siempre empezar una y otra vez de nuevo. Hacer aprendizaje de las cosas en las que nos fueron mal o que hicimos mal para, precisamente, no volver a cometerlas.
Yo estoy muy contenta y, al mismo tiempo, quiero confesarles algo. Hoy es un día muy triste y estoy muy triste porque ha muerto un amigo del alma muy querido, casi un hermano, fue testigo de casamiento del ex presidente y mío, viejo militante también, como siempre todos los amigos han estado presentes en la historia nuestra de la militancia, es así, y uno tiene que seguir igualmente. En honor a él, que fue un gran argentino, un gran compañero, fue diputado en la provincia de Santa Cruz, también sentí la obligación de estar hoy aquí cumpliendo con mi deber porque sé que él hubiera querido también que yo estuviera hoy aquí. Luego le voy a ir a dar la última mirada. Son las historias de vida que también tenemos todos, los que somos presidentes o presidentas también nos pasan cosas feas y terribles como le pasa al resto de los seres humanos. Tal vez no podemos exteriorizarlo de la manera que por ahí lo hace un ciudadano que no tiene responsabilidades. Pero bueno, en definitiva, también nos pasan.
Quiero contarles esto y decirles que, al mismo tiempo, estoy contenta porque Chaco es una provincia que necesita mucho, como todo el NOA y el NEA sufre un desequilibrio histórico estructural en materia de infraestructura económica y social de la que es tributaria frente al desarrollo que ha tenido el puerto, fundamentalmente, y toda la Pampa Húmeda que la circunda. Hubiera sido mejor tener un desarrollo más equitativo, más integral.
Pero creo que tenemos que ponernos a trabajar para seguir profundizando esta obra de infraestructura que está dotando, como bien lo decía recién el Gobernador, a todo el país con un equipamiento inédito; hacía décadas que no se hacía este nivel de inversión en materia de obra pública. Porque también, no hace mucho tiempo, se decía que la obra pública era gasto, no era inversión y había que convencer a los técnicos que nos venían a monitorear desde afuera que esto era una necesidad de inversión.
También quiero contarles que ese 8 por ciento de crecimiento de mayo se une también a una duplicación, casi 72 por ciento del anuncio de inversiones comparado con el primer semestre del año 2007-2008, 7.900 millones de dólares aproximadamente contra casi 14.000 millones de dólares que se han anunciado en materia de inversiones extranjeras y nacionales en este primer semestre, el 85 por ciento de inversiones extranjeras y el 15 por ciento de inversiones nacionales y un 33 por ciento de emprendimientos nuevos y un 67 por ciento de ampliación de los ya existentes.
Creo que además, en una gestión tan importante como la que está haciendo el Gobernador y en donde el turismo tiene que ser un puntal, como lo está siendo, en el crecimiento y en ingreso de divisas en todo el país, la dotación de infraestructura como lo que hoy inauguramos y la recuperación de nuestra aerolínea de bandera para ponerla, precisamente, al servicio de un desarrollo turísticos imprescindible, van a contribuir a la construcción de ese Chaco y de esa Argentina que alguna vez soñamos y que hoy nos toca construir.
Muchas gracias, felicitaciones y muy buenas noches a todos. (APLAUSOS)

Palabras de la Presidenta en presentación línea de financiamiento vacunas nacionales

La Presidenta anunció plan para producción de vacunas
lunes, 14 de julio de 2008
PALABRAS DE LA PRESIDENTA DE LA NACIÓN, DRA. CRISTINA FERNÀNDEZ DE KIRCHNER, EN EL ACTO DE PRESENTACIÒN DE NUEVA LÌNEA DE FINANCIAMIENTO PARA LA PRODUCCIÒN NACIONAL DE LA VACUNA TRIPLE BACTERIANA.

Muy buenas tarde a todos y a todas; señor Ministro de Ciencia y Tecnología; señora Ministra de Salud; señoras y señores titulares de organismos científicos, decanos; rectores: la verdad que es un día muy especial; yo recién cuando comenzaron con la vacuna triple le preguntaba a Lino; me acordaba de la vacuna del colegio, la que ponían en el brazo, aquella que te daban varios pinchacitos y él me dice: no, esa es la antivariólica, me dice, esta es otra. Pero lo importante, digo, es poder - como recién señalaba el ministro - articular los esfuerzos del sector público, en sus distintos estamentos: el Ministerio de Ciencia y Tecnología; la Universidad, nuestra universidad, mi universidad, la Universidad Nacional de La Plata; la parte privada, el Instituto Biológico; el Ministerio de Salud y lo que constituye la campaña nacional de vacunación, que conjuntamente con el proyecto de Sanidad Escolar, que ha puesto nuevamente en marcha la señora ministra, es lo que está contribuyendo a reconstituir un sistema de salud pública en todo el país.
También es de destacar la importancia de destinar recursos, del Estado, importantes para poder producir vacunas, en forma eficiente, en forma competitiva, articulando lo público, lo privado, y en definitiva, el interés de la sociedad y me parece que tenemos que profundizar este tipo de actividades.
Por eso, recién el ministro nos decía, que esta inversión de 9 millones de pesos, que se afecta a este programa incluye un programa más amplio, de 90 millones de pesos, casi 30 millones de dólares, en el cual se fomenta esencialmente la investigación, el agregar talento argentino y científicos argentinos para lograr una mejor calidad de vida y, fundamentalmente, una gestión estatal diferente donde no se contrapone lo público con lo privado sino que, al contrario, se articula en forma virtuosa para lograr un mejor resultado.
La verdad es que yo estoy muy contenta porque, además, participa el Instituto Biológico de La Plata, que está allí, a escasas cuadras de mi casa materna y que es realmente un instituto de una gran excelencia, con profesionales que han trabajado toda la vida en ello con mucha dedicación y con mucha pasión por la defensa de la salud y de lo público, algo de lo que nos habíamos desacostumbrado en la Argentina, a unir lo público, la salud y lo social para lograr mejores resultados.
Así que, felicitaciones a ambos ministros, felicitaciones a la Universidad Nacional de La Plata y a todos aquellos que han intervenido en el diseño y ejecución de políticas públicas activas destinadas a mejorar la gestión estatal para mejorar. As u vez, la calidad de vida y la salud de todos los argentinos.
Muchísimas gracias y tengan todos ustedes muy buenas tardes. (APLAUSOS)

Inauguración de un frigorífico en Pontevedra, Merlo, provincia de Buenos Aires


Cristina Fernández durante su visita al frigorífico de la firma Swift en el partido de Merlo, provincia de Buenos Aires.
viernes, 11 de julio de 2008
PALABRAS DE LA PRESIDENTA CRISTINA FERNÁNDEZ DE KIRCHNER EN LA INAUGURACIÓN DE UN FRIGORÍFICO EN PONTEVEDRA, MERLO, PROVINCIA DE BUENOS AIRES.

Gracias, muchas gracias, buenos días a todos y a todas. Señor Vicegobernador; señor Intendente; señor presidente global de JVS, familia Batista toda que nos visita hoy; señor embajador de Brasil, querido Mauro: quiero darles la bienvenida a todos.
Realmente es un día muy especial hoy aquí en Merlo, Pontevedra, porque estamos en la reapertura de una fuente de trabajo que agrega mucho valor a un producto típicos argentino como es la carne, la industria frigorífica. Pero con una particularidad, no es solamente una planta de faenamiento donde ingresa la res, la carnean y sale al mercado interno; no, es algo mucho más valioso todavía, porque aquí se termoprocesan reses argentinas, las denominadas vacas conserva o vacas viejas. Estoy hecha una experta en estos días que corren en la Argentina, puedo darles clases de vacas, de trigo, de soja. (Aplausos) Les puedo asegurar que jamás soñé convertirme en una especialista, pero realmente me interesa, no lo digo en broma, lo digo en serio porque creo que precisamente es uno de nuestros principales recursos, una de nuestras principales materias primas la carne, yo diría -permítanme los amigos brasileros- la de mejor calidad del mundo, "a melhor do mundo", la carne argentina. (Aplausos)
Esto de ser la mejor carne no es solamente un mérito de los argentinos, es un mérito de Dios, porque nos dio esta pampa húmeda que tenemos, nos dio un clima especial, que es precisamente lo que caracteriza a la industria argentina, no es que lo hayamos puesto los argentinos, lo puso Dios. Los economistas dicen que esto se llama renta en lugar de beneficio, porque es algo que no tiene que ver con lo que han hecho los empresarios sino con calidades específicas que tenemos por la llanura, por el clima, etcétera.
Pero lo cierto es que acá nos encontramos en un espacio de trabajo, de transformación y además de articulación entre el mercado interno y la exportación, que me parece otra de las claves virtuosas de este importantísimo grupo empresario, empresa familiar de carácter global. Hoy son los primeros en el mundo y realmente es un orgullo que en la Argentina tengan ocho plantas, que hayan invertido casi 400 millones de dólares y que estén aún en un plan de ampliación y de mayor inversión. Nos enorgullece como argentinos y lo agradecemos también por esa confianza que ponen en nosotros.
Pero yo les contaba la importancia, y que lo conciba el empresario como importante, esto es lo interesante en este caso, donde han podido conciliar los intereses del mercado interno, es decir lo que consumimos y comemos los argentinos que es carne fría, carne trozada, no comemos carne envasada, y entonces cubren lo que necesitamos en el mercado interno y con las vacas viejas, vacas conserva, hacen todo el termo procesamiento que sí consume el mundo exterior, el mundo global, y a precios que no son los nuestros, a precios en euros o en libras, porque en este caso es Inglaterra, mejor todavía que el dólar. Así podemos llegar a esa articulación que siempre decíamos nosotros, que nuestros empresarios comprendan la necesidad de cubrir el alimento, la mesa de los argentinos, y al mismo tiempo producir para colocar y ganar mucha rentabilidad en el exterior. Esta combinación, esta gente que está sentada aquí, hoy con nosotros, la ha entendido y la lleva adelante, yo quiero felicitarlos por eso.
También es producto de una decisión que ha tomado el Gobierno, que es que estas famosas vacas viejas, vacas conserva, que se producen en 10.000 toneladas de exportación por mes, sean termo procesadas, no salgan frías colgadas en un gancho al exterior, que significa que salen sin ningún valor agregado, es decir, sin generar ningún puesto de trabajo para los miles de argentinos que todavía necesitamos que tengan trabajo. (APLAUSOS)
Recuerdo que cuando realizamos el acuerdo con los productores acerca de cuáles iban a ser las cantidades de exportación al mercado externo para garantizar el mercado interno, fijamos estas 10.000 toneladas de vacas conserva por mes, y luego tomamos la decisión también como Gobierno, que ninguna de estas salieran sin termo procesamiento. Me acuerdo haber leído en alguna letra de molde una crítica porque decían que esto favorecía a determinados frigoríficos que tienen plantas de termo procesamiento y otros que no la tienen por lo tanto no pueden sacar la vaca sin valor agregado. Esto no es a favor de tal o cual frigorífico, esta es una política a favor de todos los argentinos para lograr mayor generación de trabajo.
Esto es lo que estamos haciendo y por estas cuestiones también podemos hoy estar en esta reapertura aquí en Pontevedra, donde la mitad de los trabajadores del grupo se dedica al termo procesamiento, y la otra mitad de los trabajadores se dedica a lo que podría denominarse mayoritariamente mercado interno o carne trozada.
Estas son cosas interesantes que tenemos que conocer y saber los argentinos. Porque cuando un gobierno toma decisiones, cuando un gobierno decide políticas, lo hace obviamente en torno a un modelo de desarrollo económico y social, y nuestro modelo de desarrollo económico y social tiene por objetivo agregar cada vez mayor valor a nuestros productos, porque sabemos que esto genera trabajo y también genera un mejor precio al productor. Con este acuerdo también logramos precisamente duplicar el precio que cada productor recibía por esas famosas vacas viejas o conserva, por una razón muy sencilla, porque la industria que le agrega valor puede pagar mejor precio al productor que aquel que no lo agrega.
No estamos descubriendo nada nuevo, no estamos inventando nada. Esto lo saben los países desarrollados del denominado primer mundo desde siempre. Por eso siempre nos decían que nosotros teníamos que producir únicamente materias primas sin valor agregado y ellos agregar valor en sus lugares de origen para entonces tener más trabajo.
Yo creo que hemos advertido los argentinos la necesidad de desarrollar un modelo diferente que creo, desde el 25 de mayo del 2003, se ha puesto en marcha en la Argentina. Pese a que todo el mundo nos auguraba un veranito y que iba finalmente a terminar, no, cuando uno pone como objetivo el bienestar de la patria, cuando uno pone como objetivo la producción, cuando se pone como objetivo generar más trabajo para todos los argentinos, generar riqueza, porque en definitiva cuanto mayor valor agregado, mayor trabajo, mayor riqueza va a haber para todos los argentinos, es el desafío entonces de todos nosotros hoy seguir profundizando este modelo y logrando también una mayor distribución del ingreso.
Todavía falta mucho en la Argentina, pero si uno mira atrás ve todo el camino que hemos recorrido y lo que todavía falta recorrer. Lo importante es saber que hemos tenido el acierto, el logro de poder construir entre todos una Argentina mejor que la que teníamos hace años atrás y que parecía en algún momento que se nos iba a desintegrar entre las manos.
Por eso muchas gracias a todos ustedes. Muchas gracias a esta familia que confía en Dios y que ha tomado como lema el confiar en Dios. Permítanme familia Batista agregar al lema de ustedes confiamos en Dios, la parte en la que yo también confío además de Dios, confiamos en Dios y en el pueblo que es lo mejor que tenemos.
Muchas gracias. (APLAUSOS)

Palabras de la Presidenta en la presentación de la maestria en Defensa Nacional y Estrategia

La Presidenta saluda a representantes de las Fuerzas Armadas
jueves, 10 de julio de 2008

Muy buenas tardes a todos y a todas; señora ministra de Defensa; señores ministros; señores Jefes y Oficiales de nuestras Fuerzas Armadas; secretarios; señores rectores, rectoras; amigos y amigas que hoy nos acompañan: realmente estoy muy contenta por poder llevar a cabo un sueño que es, precisamente, el de articular todo nuestro sistema universitario, creo que este es el primer paso que damos con la Universidad Nacional de Tres de Febrero, precisamente articularlo en algo tan valioso como es el concepto de la defensa nacional.
Y permítanme que, como buena universitaria y en un ambiente universitario, pueda formular algunas ponencias, en materia de lo que a mi criterio debe versar o versa la defensa nacional. La primera cuestión es esta, que acaba de exponer el señor Rector y que data del aquel viejo discurso, es cierto, del General Perón, entonces coronel Perón, pues era todavía coronel, en 1944, donde planteó el concepto de defensa civil no como una caracterización estrictamente militar, sino fundamentalmente como un concepto integral de la defensa, que es básicamente eso, o sea una Nación no se defiende únicamente con su dispositivo militar, que es un instrumento muy importante, obviamente, sino también con su dispositivo económico, social, cultural.
También quiero ver una segunda ponencia, que tiene que ver con que una defensa nacional tiene que articularse en torno a un modelo de desarrollo económico social, siempre se articular en torno a un modelo de desarrollo social y económico, que puede ser virtuoso y generar, entonces, un sistema de defensa nacional exitoso o puede no serlo.
La tercera cuestión, me parece que tiene que ver con desde dónde se formulan los principios y objetivos de un sistema de defensa nacional. Y esto creo que es muy importante porque muchas veces los objetivos o la caracterización de los conflictos o las hipótesis de conflictos en un sistema de defensa nos eran puestos desde afuera y no desde adentro. Con lo cual encierra - como digo yo- una contradicción básica con todo sistema de defensa nacional; un sistema de defensa nacional, se supone, actúa contra las fuerzas exógenas, o sea contra lo que viene de afuera hacia adentro. Si desde afuera nos imponen cuáles son las hipótesis de conflictos, no estamos entonces, ante un sistema de defensa nacional, sino ante otra cosa.
Y aunque esto parezca casi una obviedad o una verdad de Perogrullo, lo cierto es que en alguna oportunidad las hipótesis de conflictos y el sistema de defensa se impusieron desde afuera hacia adentro, y no desde adentro hacia fuera.
La cuarta, que me parece que es muy importante, que también acaba de señalar el señor Rector, es la imposibilidad, en el mundo contemporáneo y no tan contemporáneo también, de elaborar un dispositivo en el sistema de defensa nacional que no tenga, también, un fuerte contenido regional. Si esto no tiene un fuerte contenido regional, tiene fuertes posibilidades de no ser un sistema de defensa nacional eficiente y eficaz.
Y creo que estas cuatro cuestiones, si nosotros recorremos nuestras dos centurias podemos examinar y corroborar empíricamente estas afirmaciones. La primera centuria encuentra a nuestro sistema nacional de defensa, que surge con posterioridad al 25 de mayo de 1810, y luego existe básicamente en un sistema integral de Nación en armas contra quien era, en ese momento, el invasor o la fuerza colonial, uno de los ejércitos más poderosos de la Tierra. Nosotros éramos una Nación en ciernes, sin grandes estrategas militares, sin embargo pudimos vencer a partir de concebirse, toda la sociedad, como un dispositivo del sistema nacional de defensa y oponer, con toda su fuerza, a través de los instrumentos de sus fuerzas militares y también con la ayuda regional. A nadie se le escapa que la gesta de la independencia hubiera sido imposible, si además de San Martín, de O`Higgins o de Sucre, por ejemplo, no hubiera estado Bolívar, en toda la parte norte, infligiendo las grandes derrotas que impidieron seguir avanzando hacia el sur.
Vemos, entonces, cómo estas ponencias, estas cuestiones, que hoy estamos abordando, no son conceptualizaciones modernas o contemporáneas, tienen que ver con el propio desarrollo histórico de nuestro sistema nacional de defensa. En esa oportunidad, y tal vez el ejemplo más sublime y más excelso, que podemos tener, en ese sistema de defensa nacional sea, por ejemplo, la valentía, la heroicidad y el éxodo jujeño, del pueblo jujeño, cuando siguiendo instrucciones de Manuel Belgrano deciden, no sus fuerzas armadas, sino los propios ciudadanos, quemar todas sus pertenencias para que no pudieran ser aprovechadas por el ejército invasor. Tenemos entonces ahí un concepto de sistema de defensa nacional con el dispositivo militar, que era Belgrano, pero también con la convicción de todo un pueblo y con la necesidad de construir una Nación.
Luego, también tiene que ver, el modelo de desarrollo económico y social en las posibilidades exitosas de generar un sistema de defensa nacional, y que tiene que ver cómo nos pensamos nosotros económicamente y socialmente, en relación con el mundo. Yo ahí siempre tomo un ejemplo de dos países: uno la Argentina y otro Estados Unidos con dos hechos que marcaron, durante el siglo XIX, la impronta de lo que uno y otro país, en materia de desarrollo económico y social.
Lo qué significó, por ejemplo, para Estados Unidos la Guerra de Secesión, en la cual - si bien lo tradicional, lo normalmente comunicacional es que se luchaba por la libertad de los esclavos, se escribió "La Cabaña del Tío Tom", y todos lloramos con esos ejemplos sublimes, lo cierto es que todos sabemos, apenas releer un poco la historia, que había una conflictividad fuerte entre el Norte, que pretendía no instalarse como un segmento más de la economía internacional, sino que pedían industrializarse, desarrollarse en todos los ámbitos y el Sur que se planteaba como un país monoproductor de algodón, en plantaciones y entonces necesitaban a los negros como esclavos trabajando en las plantaciones, mientras que los del Norte necesitaban a los negros trabajando en las fábricas con el algodón del Sur para hacer camisetas, como alguna vez dijera ese genial argentino, que fue Don Arturo Jaureche.
Pero, en definitiva, estuvieron en pugna estos dos modelos y aquí fue, tal vez, a la inversa. Aquí, a partir del modelo de Reorganización Nacional, y yo que esto puede llegar a traer polémica pero es así, a partir de Caseros, todos creíamos que habían derrotado al tirano, que escribió "Amalia", todos lloran cuando leen "Amalia", pero lo cierto es que lo que estaba en pugna era también qué modelo económico de desarrollo y cómo se inscribía la Nación Argentina, si como un segmento de la economía internacional o con un proyecto propio industrial muy incipiente, que había a través de los saladeros, de la talabartería, de la gran ponchería que se hacía en las provincias del norte.
Pero, en definitiva, tiene que ver esencialmente, entonces, en cómo se desarrolla ese sistema de defensa nacional también con el modelo de desarrollo económico y social. ¿Por qué? Porque si un modelo de desarrollo social y económico genera mucha inclusión social, genera mucha gente ocupada, genera riqueza, también genera un sistema de defensa nacional protectivo de la totalidad de la población, protectivo de la totalidad del país porque todos tienen algo que puede ser codiciado o sacado por el otro que también es la fuerza exógena.
Por eso, siempre sostenemos que un sistema de defensa nacional está íntima y directamente vinculado con el modelo de desarrollo social y económico; no puede haber un gran sistema de defensa nacional si no se tiene un modelo de desarrollo económico y social generador de inclusión, de riquezas y de cosas que proteger dentro del propio país en su totalidad.
La tercera ponencia tiene que ver con el tema de la regionalización, de lo importante que es y que fue siempre el concebirse como una unidad regional y, a partir de allí, desarrollar un sistema de defensa.
Estuvimos durante el siglo XX como hipótesis de conflicto el enfrentamiento con nuestros vecinos. Por eso, la falta de desarrollo de toda la Mesopotamia, por eso la Mesopotamia no tenía rutas, no tiene gasoductos, todavía hay en algunos puentes que cruzan a Brasil o al Paraguay lugares para colocar -se ríe el almirante Godoy que me mira- explosivos, de modo tal que si se venía el invasor, volaran los puentes. Lo cierto que esto fue también una hipótesis de conflicto que tuvimos durante el siglo XX y que me parece, entonces, que ratifica el hecho de la necesidad de poder y concebir un sistema de defensa nacional que tenga en cuenta también la necesaria unidad que en la región tenemos que tener todos los países.
Y si en la primera centuria el presupuesto de la defensa nacional fue lograr la independencia de nuestro país, nuestra construcción como nación y durante el siglo XX producto, como lo decíamos el otro día en la Cena de Camaradería de las Fuerzas Armadas, la existencia de un mundo bipolar, la Guerra Fría, Postdam, Yalta, nos dieron una doctrina de seguridad nacional, no solamente en nuestro país sino en todo el continente que dividió en Este y Oeste al mundo y que desarrolló un sistema de defensa nacional no con hipótesis propias generadas en el país, sino con hipótesis venidas desde afuera, creo que la importancia que hoy estamos dando a la generación de nuevos cuadros, no solamente en el sector miliar, sino en la sociedad en su conjunto, y concibiendo nuestras Fuerzas Armadas como el instrumento militar de este sistema de defensa nacional, es precisamente porque al borde de iniciar la tercera centuria necesitamos también desarrollar un sistema de defensa nacional que tenga que ver con las posibles hipótesis de conflicto que se pueden generar durante este siglo XXI y que van a tener que ver con cuestiones tales como alimentos, energía, regiones escasamente pobladas altamente productivas en materia de generación de alimentos, de agua potable de energía.
Y no es que una vea un mundo terrible, pero creo que la complejidad y las cosas que vemos y escuchamos nos exigen a todos aquellos que tenemos responsabilidades institucionales y a los que no las tienen también, porque un país no se construye únicamente con quienes se sientan en una banca de diputado o en un sillón de intendente o en el sillón de Rivadavia, sino que presupone también un prepararse por parte de todos los ciudadanos y ciudadanas en las cuestiones que nos debemos involucrar porque el tema de la defensa nacional, reitero, tenemos que instalarlo definitivamente también como un concepto esencialmente cultural. Porque la actitud de la defensa nacional presupone, en principio, amar profundamente al país, amar profundamente la tierra en la que uno ha nacido, sus valores, su gente, sus expresiones, su pluralidad, su diversidad.
Por eso, la importancia que le asignamos a este primer paso en la Maestría que estamos celebrando en el acuerdo con la Universidad de 3 de Febrero de poder incorporar, no solamente a militares a la cuestión del sistema de defensa nacional, sino también interesar a la sociedad civil.
Fíjense que cuando uno visita países altamente desarrollados y con fortísimos sistemas de defensa nacional, normalmente no hay militares en las reuniones, son todos cuadros civiles, o sea, cuadros de la civilidad que se han especializado en defensa. No me ha tocado estar nunca en ninguna reunión con militares pese a ser Presidenta o por haber acompañado el ex presidente Kirchner.
Esto tiene que ver con esta concepción que es muy vieja en el mundo de concebir a la cuestión de la defensa nacional como una cuestión que atañe a toda una nación, en todos sus estamentos, en todas sus disciplinas y en todos sus sectores.
Así que, bueno, yo quería contarles hoy estas que son mis ideas y reflexiones acerca de lo que espero y concibo como un sistema de defensa nacional eficaz en el que podamos, además, aunar fuertemente en este nuevo concepto en serio de Estado Mayor Conjunto donde se expresa a la totalidad de las Fuerzas como a una sola en cuanto a los objetivos, a los diseños, a la logística, a la operatividad, obviamente, con las características que tiene cada una de ellas.
Quiero felicitar a la señora Ministra de Defensa, a los señores jefes de nuestras Fuerzas Armadas que tanto empeño han puesto en ir logrando con toda, como decía recién el Rector de la Universidad de 3 de Febrero, la experiencia que hemos tenido en las últimas décadas en la República Argentina, superando aquello y logrando, me parece, concebirnos nuevamente como alguna vez fuimos, un país en el cual todos, absolutamente todos, estemos compenetrados en la defensa de esos valores que son los valores de nuestra historia, de nuestra sociedad, de nuestro pueblo y, además, con un desarrollo económico y social que nos permita incluir a todos los argentinos.
Porque no hay mejor sistema de defensa, además, que una sociedad en la que todos puedan tener trabajo, educación, seguridad y salud. Esto nos torna muchos más aptos para lograr un sistema de defensa nacional eficaz en los tiempos que vienen.
Siempre fue así, aquí y en todas partes, no vamos a descubrir nada nuevo ni a descubrir la pólvora, simplemente a intentar poner de vuelta las cosas en su lugar de donde nunca debieron de haber salido.
Pero bueno, lo cierto es que la historia pasó y aquí estamos, como lo dije el otro día, para construir una nueva historia entre todos,
Muchas gracias y buenas tardes. (APLAUSOS)

Palabras de la Presidenta de la Nación, en festejos de la Independencia Nacional


La Presidenta junto a los funcionarios que la acompañaron durante el acto central en conmemoración del Día de la Independencia

miércoles, 09 de julio de 2008

PALABRAS DE LA PRESIDENTA DE LA NACIÓN EN EL ACTO DE CONMEMORACIÓN DEL 192 ANIVERSARIO DE LA DECLARACIÓN DE LA INDEPENDENCIA NACIONAL


Queridos tucumanos y tucumanas. Permítanme que antes de dirigirme a todos ustedes con motivo de este 9 de Julio, les pida a todos ustedes un minuto de silencio por la muerte de un tucumano en esta mañana por un accidente, el tucumano ciudadano argentino, Juan Valdéz, de Tafí Viejo, que falleció por un accidente. Quiero que todos juntos lo recordemos y guardemos, por favor, por él, un minuto de silencio.
(...silencio...)
Muchas gracias.
Gracias, gracias Tucumán, gracias por el afecto y el cariño de siempre. (APLAUSOS) Me acordaba de aquel otro 9 de julio, del último que estuvimos aquí juntos con ese día de frío y de lluvia. Y en este día de Sol, en esta mañana tan especial a 192 años de aquella gesta maravillosa, de aquella gesta donde un grupo de hombres provenientes de distintas partes de aquellas Provincias Unidas del Río de la Plata, habían llegado aquí, al Tucumán, a cumplir con el clamor del pueblo que era declarar la independencia.
A mí me gusta recordar la historia pero no tal vez la que siempre nos contaron, la historia del Billiken; a mí me gusta otra historia, la historia de los hombres y mujeres de carne y hueso, porque nuestros próceres fueron hombres y mujeres de carne y hueso que tuvieron que enfrentar luchas y oposiciones internas y fuerzas externas terribles que no querían que se declarara la independencia de las Provincias Unidas del Río de la Plata. Esa es la verdadera historia. Fueron San Martín, Belgrano, Güemes, los que oponiéndose a algunos hombres del puerto de Buenos Aires, que todavía hay algunas plazas y avenidas en nombre de ellos, se negaban a declarar la independencia porque, claro, el mundo había cambiado y volvía la restauración monárquica en Europa y entonces se quería echar por tierra con el esfuerzo y el sacrificio que los criollos, que los patriotas habían construido un 25 de mayo de 1810.
Es bueno conocer la historia, porque yo siempre digo que los pueblos que no conocen su verdadera historia están destinados, tal vez, a tener los mismos desaciertos o los mismos errores.
Pero aquel 9 de julio de 1816, esos hombres vinieron hasta aquí, hasta esa histórica Casa que acabo de visitar, a cumplir con el mandato histórico que era declararse independientes y luchar contra el invasor que colonizaba nuestras tierras.
Por eso, cuando decidí que la Cumbre del MERCOSUR, en la que debía entregar la presidencia, se hiciera aquí en esta provincia, no fue una casualidad. Yo no creo en las casualidades ni en la historia ni en la política. Fue con la decisión plena, consciente de querer poner una puesta histórica del momento actual que vive, no ya nuestro país, sino toda nuestra región, la América del Sur, porque si aquella vez se trató de la independencia de las Provincias Unidas del Río de la Plata, esta vez se trata de construir la verdadera independencia de la América del Sur junto a todas las naciones hermanas. (APLAUSOS)
Es también este momento tan particular que vive el país, que vive la región de América del Sur y que vive el mundo, el que nos coloca en disyuntivas similares a las que tuvieron aquellos hombres, la de construir, tal vez, una independencia diferente a aquella. Aquella independencia era lograr la identidad y la construcción de las nuevas nacionalidades. Cada país se liberaba del yugo colonizador y a partir de su historia e identidad, se constituía como nación.
Hoy estamos en otro momento histórico y, es precisamente la construcción de una nueva independencia que esta vez reúna los esfuerzos de todas las naciones de la América del Sur para construir en mundo cada vez más ávido de recursos naturales, con peligros diferentes y desafíos diferentes, una unidad que reconozca dos condiciones básicas aquí, en cada país, en cada nación, un modelo de desarrollo como el que estamos llevando a cabo nosotros. Porque no hay posibilidades de ser un país independiente si no somos una nación desarrollada económicamente e integrada socialmente.
Este es el primer desafío que debemos cumplir los hombres y las mujeres en los cuales ustedes han depositado la confianza. Cuando un ciudadano vota, cuando un ciudadano elige, está haciendo algo más que colocar a un hombre o a una mujer en un lugar institucional, está decidiendo también qué perfil de país, qué sociedad quiere construir. Yo estoy segura y absolutamente convencida de que los argentinos queremos construir una nación donde el trabajo, la producción y la inclusión social vuelvan a ser banderas de toda la nación para todos y para todas. (APLAUSOS)
Sé también -y ustedes tal vez lo saben mucho mejor que yo- de los obstáculos que siempre hay para quienes queremos llevar adelante gobiernos y políticas populares. Lo saben porque muchas veces fueron traicionados y abandonados, lo saben porque son, precisamente, los más humildes, los más vulnerables, los trabajadores, los obreros, nuestras clases medias las que siempre pagan el precio de políticas que no contemplen un desarrollo de país.
Por eso, sé que ustedes más que nadie, tienen un compromiso profundo con ese país que todos soñamos y que yo sueño desde muy joven. Y sé también, como lo discutíamos el otro día aquí, en Tucumán, hombres y mujeres de distintas historias, pero todos profundamente comprometidos con la suerte de sus pueblos, que el desafío del ahora para todos nosotros es lograr la unidad de las naciones de la América del Sur.
Por eso, aquí, en Tucumán, días atrás, ese conjunto de hombres y mujeres nos comprometimos, esencialmente, a hablar y abordar los temas que importan, que son los que mejoran o empeoran la calidad de vida de todos ustedes: la mesa de los argentinos, los alimentos, la energía, los temas que hoy deben develar a todos los dirigentes que tengan responsabilidad institucional, social o empresarial.
Por eso yo quería, en este 9 de julio, a poco de los doscientos años de aquella gesta patriótica, reflexionar junto a todos ustedes: ellos pudieron; ellos, que tenían menos recursos, que para llegar a un lugar debían viajar días y días; ellos, que se enfrentaron a los ejércitos más poderosos del planeta y uno a uno los vencieron, en nombre de esa valentía, en nombre de esa historia, la verdadera, la que no nos cuentan tal vez pero que intuimos que fue hecha por hombres y mujeres de coraje, los quiero convocar hoy desde aquí a todos los argentinos, desde el Tucumán, como hace 192 años, a construir esta nueva independencia, la del país de la producción, del trabajo, de la educación, de la salud, del desarrollo social y de la inclusión en una América del Sur unida, solidaria e integrada. (APLAUSOS)
Gracias, Tucumán; gracias por el afecto, a trabajar sin descanso, a luchar sin nunca renunciar a lo que nos corresponde como pueblo y como país: la dignidad de todos ustedes y mi amor siempre con todos ustedes.
Gracias, gracias Tucumán, gracias, gracias por todo el cariño, por esa fuerza, por esa confianza, no en mí, sino en el país, en la Nación y en el pueblo.
Muchas gracias. (APLAUSOS)

Palabras de la Presidenta en el acto de apertura de licitación de construcción de nuevas escuelas


La presidenta Cristina Fernández y el ministro Julio De Vido en el acto de licitación para la construcción de nuevos establecimientos educativos.


martes, 08 de julio de 2008

Palabras de la Presidenta en el acto del llamado a licitación para la construcción de nuevas escuelas

Buenas tardes. Realmente estoy muy contenta en el día de hoy porque poder anunciar la puesta en marcha de lo que es el nuevo plan de mil escuela más, que se suman al plan de 700 escuelas iniciado el 25 de mayo del 2003, nos hace sentir que estamos comenzando a saldar parte de la deuda que los argentinos tenemos con volver a poner en el lugar que alguna vez tuvo, a la escuela pública.
Ustedes saben que las primeras 150 escuelas del plan de mil, de las cuales ya 50 están licitadas, y hoy comienza el proceso licitatorio de otras 100 más, va a contribuir fuertemente a volver a reposicionar a esa escuela pública.
Es cierto lo que decía recién Juan Carlos, que no basta únicamente con una infraestructura para poder determinar el mejoramiento de la calidad de la educación pública, pero contribuye fuertemente a revalorizar frente a la sociedad, y a dar uno de los instrumentos, que es la infraestructura, para poder mejorar esa calidad educativa.
El compromiso del financiamiento que ha tenido el Estado, desde el primer momento cuando obtuvimos la sanción de aquello que parecía un sueño en la Argentina, y que era destinar seis puntos de nuestro Producto Bruto Interno precisamente a todo el sector educativo, la reformulación o la puesta en marcha nuevamente de las escuelas técnicas, en las cuales tenemos que insistir fuertemente porque son las que van a capacitar a nuestros jóvenes para su primer empleo. Uno de los principales problemas que hoy tenemos ante el crecimiento económico, ante la instalación de nuevas inversiones, de nuevas fábricas, es precisamente lograr personal joven y capacitado técnicamente para ocupar los puestos de trabajo.
Son los dramas del crecimiento, los prefiero sinceramente a los otros, adonde no había trabajo ni lugares que ocupar. Pero lo cierto es que el otro día estaba reunida con importantes empresarios de autopartes y del sector de las terminales automotrices, que nos planteaban la necesidad de profundizar el tema de las escuelas técnicas para lograr mayor ingreso, porque muchas veces falta personal calificado. Y no estamos hablando de un altísimo grado de calificación, sino de mediana calificación, como puede dar una escuela técnica a un tornero, un matricero, etcétera, para poder dar cuenta del avance que estamos teniendo en sectores muy importantes y de alto valor agregado, como por ejemplo es el sector de autopartes, al cual también hemos dado una ley de promoción, pero que necesitamos acompañar con el recurso humano, el recurso financiero y recurso humano altamente capacitado.
También sabemos, como decía Juan Carlos, que esta capacitación no se logra de un día para el otro. Cuando uno ha tenido décadas de abandono en la escuela, cuando uno ha tenido décadas de pérdida de instrucción de las fuentes de trabajo, destruye algo o se cierra algo más que un negocio o una fábrica, se destruye una cultura que es, en definitiva, la cultura que nos prepara mentalmente para el trabajo.
Yo siempre digo que nosotros formamos parte de una generación en la cual veíamos a nuestros padres que se iban a tal hora a trabajar y que volvían a tal hora del trabajo; que entonces nosotros teníamos la obligación de ir al colegio donde estudiábamos, volvíamos y hacíamos los deberes. Este ejercicio, esta educación, hace al funcionamiento de una familia y de una sociedad que también va preparando y estructurando las cabezas en una cultura diferente y en un funcionamiento social diferente, el de las obligaciones, el de los derechos a la educación y al de la obligación de estudiar, el derecho a tener una escuela muy digna y bien equipada, pero también la obligación del maestro de estar capacitado para estar frente del grado y del alumno de respetar a ese maestro, respetarlo como dador de saberes, como dador de conocimiento y, al mismo tiempo, el esfuerzo de la familia para comprometer a ese alumno en el proceso del conocimiento.
Siempre es muy complejo el funcionamiento de una sociedad y la educación no podía estar ajena a esa complejidad.
Estamos hoy dando uno de los instrumentos, pero sabemos que todavía tenemos que trabajar mucho sobre los restantes factores que componen la educación: el conocimiento, el proceso de aprender, de saber.
También estamos trabajando fuertemente en un sistema de becas para poder mejorar, reasignar y, sobre todo, ver cómo va desarrollándose ese sistema de becas que, primero, empezó para fortalecer a los sectores más vulnerables pero que luego, con la generación de trabajo y de mejores salarios, necesitamos por allí reformularlo para entonces comenzar a dar especificidades diferentes también en el sistema becario.
En fin, sobre todas estas cuestiones que tienen que ver con la gestión de todos los días, hoy estamos dando cumplimiento a una que es importantísima: la infraestructura y comenzando con el proceso de 1.000 escuelas nuevas más para los argentinos que se suman a las otras 700. En definitiva, construyendo y trabajando por una Argentina mejor.
Muchas gracias y tengan ustedes muy buenas tardes. (APLAUSOS)

sábado, 12 de julio de 2008

Licitación del ramal Puerto Deseado - Las Heras de la línea General Roca

La Presidenta encabezó el acto de adjudicación de la licitación para la construcción de obras de reacondicionamiento y rehabilitación del ramal Puerto Deseado-Colonia Las Heras, de la línea General Roca, Santa Cruz.
PALABRAS DE LA PRESIDENTA DE LA NACIÓN, CRISTINA FERNÁNDEZ DE KIRCHNER, EN EL ACTO DE ADJUDICACIÓN DE LA LICITACIÓN DEL RAMAL PUERTO DESEADO - LAS HERAS LÍNEA GENERAL ROCA, PROVINCIA DE SANTA CRUZ

Buenos días a todos y a todas. La verdad que esta obra no es únicamente de Santa Cruz o de la Patagonia sino de toda la Argentina. El corredor ferroviario Puerto Deseado - Colonia Las Heras fue desmantelado prácticamente en el año 1978 por el entonces ministro de Economía, doctor Alfredo Martínez de Hoz, juntamente con otro ramal ferroviario que unía la ciudad de Comodoro Rivadavia y Colonia Sarmiento. Aquel fue no solamente puesto fuera de funcionamiento sino que además fue desguasado. Nosotros en la provincia mantuvimos el ramal sin actividad y la puesta en marcha nuevamente es un viejo sueño de la región Patagónica y, por supuesto, de todos los santacruceños.
Hace pocos días inaugurábamos en Pico Truncado, una ciudad que queda entre Puerto Deseado y Las Heras, una fábrica cementera, también otra firma nacional de Petroquímica Comodoro Rivadavia, que va a producir en su nueva planta de Pico Truncado -a la que construimos con parte de los fondos aquellos ahorrados por el entonces gobernador de la provincia, aproximadamente 38 millones y medio de dólares fueron aportados a un emprendimiento de 142 millones de dólares- y va a tener la oportunidad con este ramal de poder transportar y exportar precisamente con un medio de transporte sustancialmente más barato y por lo tanto hacer más competitiva la actividad.
La posibilidad además, mencionada por el señor secretario de Transporte, de llegar con esto hasta el Pacífico, viejo sueño, no son tantos kilómetros y lo cierto es que la zona no es tan escarpada como para hacer demasiado costoso el emprendimiento, coloca a esta obra del corredor ferroviario de Puerto Deseado-Las Heras en una obra que yo determinaría como estratégica no solamente para la región sino también para la República Argentina.
Y constituye, junto con el despliegue que se está haciendo en el territorio de todo el país en la reconstrucción del sistema ferroviario, una apuesta a un modo de transporte que algunos habían considerado obsoleto, no hace 30 ó 40 años sino apenas 10 años. Claro, hace 10 años atrás nadie imaginaba el barril del crudo a 150 dólares, en ese momento estaba a 8 dólares y entonces era conveniente tal vez no hacerlo por transporte ferroviario sino por algún otro tipo de transporte. Lo cual nos obliga a todos, a quienes tenemos responsabilidades en la gestión del Estado, a repensar la forma de gestión y la forma precisamente de encarar con una mirada estratégica y multimodal las posibilidades en todas las áreas -de modo tal de no quedar encorsetados en un solo esquema- que luego, cuando se modifican variables internacionales, cuando se modifica el mundo que está constantemente en evolución y cambio, nos permita tener salidas alternativas.
Creo que, además, esto obedece a una concepción estratégica en la gestión del Estado que precisamente nos obliga a quienes tenemos responsabilidades a tener esa mirada que va siempre un poco más allá de lo que sólo acontece en el día de la fecha o de lo que sólo aparece escrito en las páginas de los diarios. Tenemos que poder mirar un poco más allá y tener una lectura diferente que nos permita precisamente advertir que nada, como siempre lo digo, es para siempre, salvo la muerte, y entonces tener esa amplitud, esa apertura que hoy nos permite reposicionar al sistema ferroviario como una de las formas de transporte más eficaces, más eficientes en términos de competitividad por los costos que demanda.
Un planteo diferente y también estamos terminando otro ramal, el de Río Turbio en la provincia de Santa Cruz, que juntamente con todas las obras que estamos abordando significa una apuesta al día de nuestro sistema ferroviario nacional.
¿Qué falta? Falta un montón, sin lugar a dudas, pero hay que recordar lo que los argentinos inclusive nos hicieron pensar culturalmente acerca de los trenes también, porque muchas veces cuando se producen cambios, cuando suceden cosas como estas del desmantelamiento de la red ferroviaria del país, no pueden hacerse si no se cuenta con cierto grado de aquiescencia de la propia sociedad y muchas veces la sociedad es inducida o manipulada a pensar que tal o cual cosa debe ser dejada de lado, inclusive muchas veces no advirtiendo que esto va en contra de sus propios intereses.
Creo entonces que todos debemos hacer un esfuerzo muy grande intelectual, un esfuerzo muy grande de pensar más allá de lo que se ve inmediatamente o de lo que nos muestran o nos cuentan inmediatamente, para advertir que estamos viviendo en un mundo muy complejo, cada vez más complejo, que exige por parte de todos, todos, y cuando hablo de todos hablo desde quien tiene la más alta magistratura hasta el ciudadano de a pie, como normalmente decimos, de tener esa visión, esa mirada diferente y poder no solamente mirar, como digo, sino además ver y no solamente leer y saber, sino además entender y comprender.
Así que con todo eso, felicito a la Secretaría de Transporte, al Ministerio de Planificación, esperemos que los adjudicatarios de la obra cumplan los 6 meses, esperemos que así sea. Tenemos mucha fe y además está la Secretaría de Transporte no solamente para tener fe en los empresarios sino para tener control sobre los mismos que siempre ayuda más que la fe, y poder cumplimentar en los 6 meses de plazo la obra que va a tornar mucho más competitiva a la zona Norte de la provincia de Santa Cruz, a la Patagonia y por ende a la Argentina.
Muchas gracias y buenos días.

Cristina Fernandez en la cena de camaradería de las Fuerzas Armadas

Cristina Fernandez en la cena de camaradería de las Fuerzas Armadas
lunes, 07 de julio de 2008

PALABRAS DE LA PRESIDENTA DE LA NACION, CRISTINA FERNANDEZ DE KIRCHNER, EN LA CENA DE CAMARADERIA DE LAS FUERZAS ARMADAS

Señor vicepresidente de la Nación; señora Ministra de Defensa; señores jefes de Estado de las tres Fuerzas y señor Jefe del Estado Mayor Conjunto de las Fuerzas Armadas Argentinas; señores oficiales; invitados oficiales: en primer término y antes de abordar esta mi primer intervención en la Cena de Camaradería de las Fuerzas Armadas quiero hacerles el anuncio que me habían solicitado bajo amenaza de no darme cena esta noche los tres jefes de las Fuerzas Armadas si no anunciaba finalmente el aumento que se les concede a las Fuerzas Armadas, similar al resto de la administración pública nacional. Muy en broma en el último encuentro que mantuvimos en la Escuela de Suboficiales Sargento Cabral me decían "Presidenta, si no anuncia el aumento me parece que no le vamos a dar comida después". Y como eran tres hombres y las mujeres somos débiles y no tenemos fuerza para oponernos, finalmente dije vamos a dar el aumento que corresponde a nuestros oficiales, suboficiales y a todo el personal de nuestras Fuerzas Armadas, en forma similar al que ha recibido el resto de la administración pública nacional.
Es para mi un gran compromiso la intervención de esta noche frente a todos ustedes, que es en definitiva transmitirles a mis subordinados el pensamiento de la Jefe de Estado en torno a un tema clave como es nuestro sistema de defensa nacional, y los desafíos que esto presupone en un mundo muy complejo y cada vez más complejo. En principio definir los dos ejes básicos que constituyen nuestra comprensión; primero la de un Gobierno democráticamente electo, que es quien por imperio de la Constitución diseña y planifica la concepción, las alianzas estratégicas y la ejecución de una política de defensa, en el marco irrestricto del respeto a los derechos humanos y la autodeterminación de los pueblos. En segundo termino lo que ha definido nuestra Ley de Defensa Nacional, la construcción del sistema de defensa nacional donde las Fuerzas Armadas constituyen precisamente el instrumento militar de este concepto de la defensa nacional.
Bajo esos dos ejes fundamentales quiero abordar en esta noche siete puntos que para mí son claves: el primero, la integración definitiva de nuestras Fuerzas Armadas a los derechos y garantías que tienen todos los ciudadanos argentinos. Nuestros hombres y mujeres que con vocación han elegido la carrera de las armas son ciudadanos y ciudadanas especializadas en el uso de armas y con estudios en materia de defensa nacional. Pero son también ciudadanos que merecen todos los derechos y garantías del resto de la ciudadanía. Por eso creemos que es inminente la sanción de un nuevo código de justicia militar, que fuera enviado al Parlamento argentino por el anterior gobierno, y que sin perder de vista las características específicas y especiales que tiene la actividad militar en cuanto a jerarquía, en cuanto a cumplimiento de los órdenes, plantea un sistema de derechos y garantías de los cuales los hombres y las mujeres de armas no pueden carecer. Se plantea inclusive la figura del obusman dentro de las propias Fuerzas Armadas, como una garantía de esos derechos civiles que también tienen todos los argentinos, vistan uniforme o no, a acceder a una justicia absolutamente igualitaria. La igualdad no es una concesión, es esencialmente la base intrínsica de un sistema democrático, civilizado y desarrollado.
La segunda cuestión pasa también dentro de esta integración, lo que hicimos hace unos días en al Escuela de Suboficiales Sargento Cabral, y que también presupone la necesidad de acceder por parte de nuestros miembros de las Fuerzas Armadas, en este caso suboficiales, a bienes básicos como la vivienda. Por eso también la integración de los hombres de armas a planes federales de viviendas. No es tampoco una concesión magnánima, es simplemente la concreción efectiva y práctica de esta igualdad que demanda la sociedad para todos sus integrantes. Esperamos también poder abordar en esta planificación la incorporación de los oficiales también a planes especiales que vamos a lanzar para sectores con un poder adquisitivo mayor del grupo familiar en su conjunto, de manera tal que todos también puedan acceder a estos bienes básicos de un estado de bienestar.
La siguiente cuestión tiene que ver con la reformulación estructural de la gestión de las Fuerza Armadas. Hace un mes atrás aproximadamente me tocó visitar el Edificio General Libertador José de San Martín. En esa oportunidad tuve la visión de cómo vamos a concebir la ejecución de un sistema de defensa, no ya como compartimentos estancos entre las tres fuerzas como era antes, cuando cada una tenía un sistema que se repetía o se replicaba en forma similar en cada una de las fuerzas, muchas veces gastando recursos innecesarios, porque por allí podría hacerse en forma absolutamente centralizada, desde la adquisición hasta licitaciones. Pero también en tareas que tengan que ver con la especificidad del hecho de ser un integrante de las fuerzas Armadas, y que en realidad correspondían a una visión de una Argentina de otro siglo, del siglo pasado, en donde cada fuerza se sentía como algo diferente a la otra. Concebimos ahora, en este sistema integrado de defensa, a nuestras Fuerzas Armadas como una sola, con distintas, con distintas especificidades, pero una sola. Creemos que esta reformulación estructural de gestión centralizada, que fue desarrollada en esa visita que tuvimos oportunidad de realizar al Edificio General Libertador San Martín, constituye un avance muy importante en el marco de dar mayor eficiencia, mayor eficacia a la gestión de un sistema de defensa.
La tercera cuestión es la formación del militar. En estos días, creo que el jueves, vamos a presentar conjuntamente con el Rector de la Universidad de Tres de Febrero la maestría en sistemas de defensa. Porque normalmente en nuestra sociedad el tema de defensa se vio como algo que podía ser solamente estudio por parte de quienes habían accedido a la vocación militar, como si la cuestión de la defensa solo pudiera ser militar, cuando en realidad vemos en todos los países desarrollados, en todos los países modernos, que tienen grandes y eficaces sistemas de defensa, una participación de la sociedad civil en los estudios y formación de ése sistema de defensa nacional. Creemos entonces que más allá de que obviamente en las unidades académicas específicas de las Fuerzas Armadas, donde las cosas que hacen estrictamente a las cuestiones de armas de preparación militar, lo que puede ser el aspecto militar, dejarlo en los institutos militares. Pero todas aquellas materias, todos aquellos objetivos que se dan en universidades públicas nacionales o privadas, deben ser también para una mejor cohesión de la sociedad en un sistema de defensa. Todos debemos entender que la defensa nacional no es un concepto únicamente militar, es profundamente un concepto político, geopolítico, donde el aspecto militar es un instrumento fundamental, pero no es único.
El cuarto abordaje que voy a hacer aquí es el tema de industria y defensa. Larga historia tienen nuestra fuerzas Armadas en la defensa y la construcción de la industria nacional. Generales como Savio, como Mosconi, hicieron escuela porque concebían que no hay mejor sistema de defensa que una nación desarrollada industrialmente, en todos sus aspectos y tareas. Estamos trabajando fuertemente para que junto a los que lo que entendemos fue algo fraudulento en el tema de Tandanor, conjuntamente con los astilleros Domec García, podamos desarrollar allí un polo en el cual la industria naval tenga el rol que siempre debió tener y nunca se debió abandonar. Podríamos hablar también en materia aeronáutica, nuestro país pionero en América del Sur en el desarrollo aeronáutico, cuando otras naciones ni siquiera habían abordado el tema. Y hoy vemos nuestro atraso científico, tecnológico y de desarrollo industrial en estos temas, y entonces pensamos, reflexionaos en voz alta, cuánto tiempo hemos perdido, cuántas cosas podríamos haber hecho. Pero no es hora de mirar el pasado para lamentarse ni para llorar, sino para aprender de los errores que cometimos todos y de no volver a cometerlos. Creo que esta es la enseñanza más importante que puede tener el análisis de nuestra historia.
También el abordaje muy importante del rol que están cumpliendo nuestras Fuerzas Armadas en las misiones de paz, de las cuales debo decirles estoy absolutamente orgullosa. Me toco visitar este año nuestra misión en Haití, la MINUSTA, donde nuestras Fuerzas Armadas tienen a su cargo el hospital que atiende a los 11 mil efectivos de la misión de paz, pero al mismo tiempo también cumple misiones militares tal vez en los lugres más graves en cuanto su situación social. Quiero decirles que visitando ese hospital militar me sentí muy orgullosa por el desempeño y el alto profesionalismo de nuestros médicos, médicas, enfermeros, oficiales, todos en una tarea que también sabemos que estamos haciendo en Chipre y que tengo intenciones de poder concretar una visita a nuestras Fuerzas ahí antes de fin de año para realmente llevar la palabra, en mi carácter de Presidenta de todos los argentinos, de aliento por el rol que cumplen hombres y mujeres en estas misiones y que, además, ponen a la Argentina en un lugar de defensa del multilateralismo de las misiones de paz y de la necesidad de construir un mundo más seguro.
Finalmente, quisiera abordar lo que considero, tal vez, lo básico: el sistema de defensa y la concepción estratégica que tiene esta Jefa de Estado acerca de cuál debe ser nuestro sistema de defensa nacional en el mundo que viene.
Hablar del mundo que viene, hablar de nosotros mismos, de nuestra historia implica, necesariamente, hacer un repaso de cómo interactúa en nuestra historia de casi doscientos años la conformación de un sistema nacional de defensa, cómo interactúa en circunstancias externas e internas que fueron definiendo las distintas etapas que tuvo nuestro sistema de defensa nacional.
En los orígenes de la patria, en la construcción de la patria, el sistema de defensa nacional tuvo un fuerte acento de decisión interna. El hecho de que yo esté aquí en julio, como lo han hecho otros presidentes, es precisamente porque acerca el día de nuestra independencia. Y nuestra independencia fue decidida y apurada, por así decirlo, aunque no constituya un término muy académico, precisamente por hombres integrantes de las Fuerzas Armadas frente a políticos que aquí, en Buenos Aires, tal vez no tenían demasiadas intenciones de declarar la independencia nacional porque habían cambiado las cosas en el mundo y nuevamente, luego de la derrota napoleónica en Europa, corrían vientos de restauraciones monárquicas.
Sin embargo, fue el general José de San Martín, acompañado por otro hombre que no era militar, pero que se había hecho militar para defender a la patria, como fue Manuel Belgrano y con Martín Miguel de Güemes, los que empujaron precisamente a que en Tucumán se declarara la independencia el 9 de julio de 1816.

Allí había fuertes influencias externas para así no hacerlo, pero entonces el sistema de defensa nacional funcionó con los intereses de adentro y para este país que se estaba construyendo en una interactuación muy fuerte con lo que el pueblo y sus Fuerzas Armadas demandaban para la nación. Fue la primera centuria que definió este perfil de sistema de defensa nacional.

La segunda centuria, la del siglo XX, nos encontró con un sistema de defensa nacional donde los criterios y los objetivos fueron colocados, fundamentalmente después de la Segunda Guerra Mundial, desde afuera hacia dentro. Todos ustedes lo saben, un mundo bipolar, un mundo dividido en dos luego de Yalta y Posdam, implicó que se reformularan todos los sistemas de defensa nacional, fundamentalmente también en nuestro continente, y, entonces, el peligro no estaba ya afuera de las fronteras sino adentro.

Me interesa analizar las cosas que nos han pasado, no con un dedo acusador, sino fundamentalmente para entender cómo han interactuado los agentes externos e internos en la historia que nos tocó vivir durante el siglo XX de interrupciones de gobiernos constitucionales y democráticos.

Sería muy fácil para mí pararme aquí esta noche y tal vez con un tono admonitorio dar clases de quién tuvo la culpa, pero lo cierto es, bueno es reconocerlo en este ámbito, que las cosas que han pasado en la República Argentina en materia de interrupciones institucionales no tuvieron únicamente a las Fuerzas Armadas como sus autores. En todo caso, como mascarones de proa de otros designios que venían desde afuera y también desde adentro, pero que cuando hubo que hacerse cargo de la historia no se hicieron y solamente fueron las Fuerzas Armadas las que allí quedaron como si fueran los únicos responsables de las cosas que habían pasado en la República Argentina. Esto no exculpa ni quita responsabilidades, pero coloca las cosas en su justo término histórico.
Hubo también sectores civiles que impulsaron también esas interrupciones institucionales. Tal vez la más terrible de todas, la última, la trágica, la del 24 de marzo de 1976 a la que espero referirme por primera y última vez como Comandante en Jefe de todos ustedes porque de lo que pasó y de los responsables debe ocuparse la Justicia.
Yo me voy a ocupar, junto a ustedes, de construir este sistema de defensa nacional que requiere el mundo que viene, que ya no es un mundo dividido entre los peligros de nuevas o extrañas ideologías, sino que por el contrario, es un mundo más concreto, más difícil, donde el punto estará en la defensa de nuestros recursos naturales, de nuestra Antártida, de nuestra agua.
Hace pocos días me tocó estar en la Conferencia de FAO en Roma y escuché al señor Presidente de la República Federativa del Brasil condenar duramente declaraciones de una importante dirigente europea donde se planteaba el derecho del mundo a cuidar de la amazonía. Y ayer leía una vez más declaraciones del Presidente de la República Federativa del Brasil respondiendo a otro ex importantísimo ex Premier europeo que también sostenía que amazonía y el acuífero guaraní deben ser patrimonio de la humanidad.
Aquí me viene a la memoria algo que dice un amigo mío gobernador de una provincia del Noreste argentino: "Viste, Cristina, siempre declaran patrimonio cultural al agua, a los glaciares, a la amazonía, nunca desde allá se declaran patrimonio de la humanidad las patentes medicinales, los remedios, el conocimiento". Siempre son curiosamente los recursos naturales los que son declarados patrimonios culturales o naturales de la humanidad.
Creo sinceramente que este siglo XXI va a exigir de los sistemas de defensa nacional, entendidos estos como una construcción global de la sociedad en su conjunto y sus Fuerzas Armadas como el instrumento militar de ese sistema de defensa, el punto clave del siglo XXI. La defensa y protección de nuestros recursos naturales nos hacen, particularmente aquí, en América latina, a argentinos, brasileros, venezolanos, chilenos, uruguayos, bolivianos, ecuatorianos como una región productora de energía y alimentos, dos elementos claves que seguramente ustedes me habrán escuchado mencionar mucho antes de que esto tomara la dimensión mediática que hoy tiene cuando me tocó asumir como Presidenta de todos los argentinos el 10 de diciembre del año pasado.
Por eso, los invito a todos ustedes, oficiales de las Fuerzas Armadas, hombres y mujeres que han decidido ejercer su vocación, de tener las armas para defender a la patria, a construir con esta concepción y en este mundo difícil este nuevo sistema de defensa nacional que exige el ahora.
Yo sé que muchos de ustedes han pasado momentos difíciles y seguramente podrán seguir, tal vez, pasando momentos difíciles, pero hay cosas, señoras y señores, que solamente las pueden solucionar, como digo yo, la coronela Justicia y el general Tiempo y creo, compatriotas que visten uniforme, que en nombre de todos los argentinos, de todos los hombres y mujeres, jóvenes, viejos, profesionales, intelectuales, obreros, trabajadores, en nombre de todos ellos creemos que nos merecemos todos una historia diferente. Y construir una historia diferente a la que hemos tenido para entrar en el tercer siglo de vida, va a ser una obligación que todos vamos a tener. Cuanta más alta la responsabilidad, más alta la contribución a la construcción de esa nueva historia. Pero quiero decirles a todos ustedes que cada uno de ustedes, hombres y mujeres que visten uniforme, tienen su lugar para cumplir en esta nueva historia que queremos construir.
Muchas gracias y quiero brindar por la patria y por el Día de la Independencia que se celebrará el 9 de julio próximo.
Por la Argentina, por la patria y por la independencia, ¡salud!

Palabras de la Presidenta en el anuncio de obras para Almirante

Cristina Fernández escucha anuncio de inversiones para el municipio de Almirante Brown
lunes, 07 de julio de 2008

Palabras de la Presidenta de la Nación en el acto de firma de convenio para el programa de asistencia financiera para la pavimentación de áreas periurbanas de grandes ciudades, en la provincia de Buenos Aires.

Gracias, muy buenas tardes a todos y a todas. Señor Gobernador; señor Intendente de Almirante Brown; señores Intendentes que le acompañan; vecinos y vecinas de Almirante Brown; fuerzas vivas de la misma: muchas gracias por estar aquí acompañándonos, en esta que es una tarde de todos, porque firmar un acuerdo en el cual vamos a poder pavimentar, en forma conjunta, entre el municipio de Almirante Brown, el Ministerio de Planificación Federal, concretamente la secretaría de Obras Públicas, nada más ni nada menos 800 cuadras de pavimento, es como decía Daniel, "empezar a salir del barro". Me gustó esa frase de Daniel, "salir del barro", algo que no solamente se limita a lo fáctico de una calle sin pavimento; salir del barro para todos los argentinos ha sido, también, conseguir más trabajo, mejores salarios, viviendas en los Planes Federales I y II, más escuelas, más educación, un salto cualitativo que hemos dado todos, inversiones. Estaba repasando el informe que me acercó hoy, la licenciada Beatriz Nofal, este primer semestre de 2008, los anuncios de inversiones nacionales y extranjeras, ascienden a la suma de 13.581 millones de dólares, 72 por ciento más que los anuncios del primer semestre de 2007, 72 por ciento más. (APLAUSOS). Y de esos 13.581 millones, 33 por ciento corresponden a nuevos emprendimientos y un 67 por ciento a ampliaciones de inversiones ya existentes. También es importante que el 85 por ciento del total de los anuncios son inversiones extranjeras y el 15 por ciento inversiones nacionales. Esto, un poco, para salir del barro también, del barro que muchas veces nos quieren instalar como que "bueno, todo está mal y a los argentinos nos va cada vez peor". Afortunadamente, para nosotros, para todos, aún para los que piensan y dicen estas cosas, a los argentinos nos sigue yendo bien. Y nos sigue yendo bien, en principio, porque somos un país con muchísimas oportunidades, no solamente en cuanto a nuestros recursos naturales, sino también en cuanto a nuestros recursos humanos. Pero fundamentalmente porque creo que hemos recuperado la autoestima, la convicción, la idea de que podemos tener un proyecto de país propio, que no se niega al mundo de la globalización, pero que tampoco se integra como un segmento más, sino que al contrario, desde su propia identidad, de sus propias posibilidades, de sus propios recursos elabora, diseña y ejecuta una política que estamos llevando adelante desde el 25 de mayo de 2003, y que ha puesto el eje en la producción, en el trabajo, en la movilidad social, en la necesidad de dotar de infraestructura a este país tan desigual, no solamente en términos sociales, sino también en términos de desarrollo territorial. Lo podemos ver, aquí mismo, acá cerca, no hace falta irse al NEA o al NOA, basta apenas cruzar la General Paz para ver todo lo que todavía falta hacer en materia de salud, de agua potable, de pavimento, de viviendas.
Yo recién veía las cifras que se desgranaban de cada uno de los municipios de nuestro Conurbano Bonaerense cuánto le falta de pavimento y veía que el más alto era el de nuestra querida Matanza con el 14 por ciento todavía de sus calles sin pavimentar. También en materia de salud, la necesidad de nuevos hospitales, la necesidad de centros primarios de atención de la salud, más escuelas y también más políticas activas promocionales para que lograr que nuestros jóvenes vuelvan a creer que es la educación la llave del progreso y del ascenso social.
Lo estamos haciendo con todas las dificultades naturales de un mundo complejo que cada vez se va a complejizar más, pero que nosotros, porque creo que esto es lo que caracteriza a un dirigente lo hemos advertido, esto que hoy ocupa las primeras planas de todos los diarios internacionales en materia de energía y alimentos, en fin todo lo que podemos ver a diario.
Nosotros sabíamos que esto venía, porque un dirigente no es alguien que solamente es electo o que ocupa un sillón, sea de gobernador, de intendente, de presidente o de legislador o de concejal, el dirigente es aquella persona que puede anticiparse a los problemas que vienen, que puede verlos antes que estos sucedan y como los anticipa, los pueda abordar, muchas veces en climas de incomprensión, incomprensión que muchas veces se da por ignorancia o por manipulación o por intereses encontrados, pero puede suceder por una combinación de todos estos factores que muchas veces no se advierten y luego, con el paso del tiempo, podemos ver claramente el porqué de las decisiones, el porqué de las políticas.
Entonces, creo que en esta mirada diferente que tenemos que tener los argentinos, no solamente de mirar, sino además, de ver, no solamente de saber, sino además, de entender y comprender, creo que el ejercicio democrático de esta sociedad nos va a hacer más ciudadanos y más argentinos que nunca.
Por eso, esto que estamos haciendo hoy, este convenio en esta oportunidad con Darío Giustozzi, el Intendente de Almirante Brown, para 800 cuadras más de pavimento, es un paso más para lograr esa Argentina, esa provincia de Buenos Aires, motor central y productora de gran parte del PBI nacional también, es un escalón más de la escalera que nunca se deja de subir, porque los peldaños del progreso no tienen fin, siempre las expectativas van creando mayores necesidades, el vecino que consigue el pavimento después quiere que además venga el resto también, por allí, el mejoramiento de la casa, el mejoramiento de la escuela, el hospital. Esto es natural, no debemos ponernos nerviosos quienes tenemos responsabilidades institucionales, hace a la condición humana, siempre escalar un poco más, un poco más de progreso, un poco más de bienestar. Esto es lo que moviliza al ser humano en la tarea cotidiana de la vida junto a él y a su familia.
Creo que con esta comprensión es que todos, no solamente los dirigentes institucionales, los dirigentes sociales, los dirigentes empresariales, sindicales, todos los actores de esta Argentina tan diversa, tan plural y tan compleja vamos a comprender.
Así que, yo estoy muy contenta hoy, muy pero muy contenta. Entre otras cosas, porque acabo de venir de la CGT, ese edificio histórico donde recordamos a un gran argentino como fue el doctor Norberto Centeno, uno de los autores de la Ley de Contrato de Trabajo, la 20.744 y también mentor de la Ley de Asociaciones Profesionales. Vengo de un lugar histórico y además, haber estado en el Salón Felipe Vallese, ahí hablaban Perón y Evita, es como que uno siente que es demasiado grande el lugar.
Creo que todos los argentinos hemos comprendido finalmente que la historia la construimos todos, quienes están con responsabilidades institucionales y cada uno de los ciudadanos y ciudadanas que conforman este bendito país.
Así que, felicitaciones Darío por este logro para Almirante Brown, felicitaciones a todos los vecinos y a todas las vecinas, a todas las fuerzas vivas de Almirante Brown un abrazo, felicitaciones Daniel porque sé de tu empuje permanente, casi obsesivo -Daniel es un obsesivo del trabajo, un enfermo del trabajo y está bien que así lo sea-, es un gran gobernador y quiero agradecerles a todos ustedes el esfuerzo que ponen para que las cosas sean todos los días un poco mejor.
Muchas gracias y buenas tardes. (APLAUSOS)

Palabras de la Presidenta en acto homenaje al Dr. Centeno

La Presidenta participó de acto de homenaje al abogado Norberto Centeno
lunes, 07 de julio de 2008
PALABRAS DE LA PRESIDENTA DE LA NACIÓN, DRA. CRISTINA FERNÁNDEZ DE KIRCHNER EN EL ACTO DE HOMENAJE AL DR. NORBERTO CENTENO, EN LA SEDE DE LA CENTRAL DE TRABAJADORES ARGENTINOS, EN SAN TELMO.

Gracias, después de escuchar el fuerte aplauso que le han dedicado a nuestro ministro de Trabajo, ya sé cómo viene a negociar la paritaria, cuando viene acá a la Confederación General del Trabajo. Bueno, yo no quiero contarles la alegría, que tengo hoy, la inmensa alegría y la emoción, que siento al estar aquí, en la Casa de los Trabajadores y en este salón, que se llama nada más y nada menos que Felipe Vallese, el primer desaparecido de la Argentina, que no por casualidad era obrero, precisamente. (APLAUSOS).
Hoy hacemos un homenaje a un hombre como Norberto Centeno, se mezclan historias personales, historias de vida, historias políticas, pedazos de la historia del país. Él nace un 17 de febrero de 1917, cincuenta años y un día antes que mi hijo mayor, Máximo, y lo secuestran el 6 de julio de 1977, el día que mi hija Florencia nace, tres años después; lo matan el 9 de julio, el Día de la Independencia. Fue un hombre comprometido con su historia, ex preso Conintes, ex preso de la revolución libertadora, también, en el 1955.
Yo pensaba, antes de venir acá, cómo se rinde homenaje a un hombre que tiene esa historia, que fue prácticamente el autor de la 20744, el auténtico digesto jurídico de los derechos de los trabajadores y trabajadoras, y fundamentalmente de las trabajadoras argentinas: la licencia por maternidad, por matrimonio y tantísimas cosas.
¿Cómo se rinde, con qué palabras? ¿Hay palabras para rendir homenaje a un hombre así? Y yo digo que uno de los mejores homenajes que uno puede hacer, es recordar su coherencia, la coherencia que tiene quien ha decidido representar intereses y vivir en función de esa representación, sin renunciar nunca a ella.
Él desapareció junto a otros hombres de derecho, en la famosa Noche de las Corbatas, de Mar del Plata, un año después de otra noche, que tuvo lugar en mi ciudad, en La Plata, la Noche de los Lápices, jóvenes por un lado, muy jóvenes; trabajadores del derecho, por el otro, profundamente comprometidos con los intereses precisamente, no solo de un sector de la sociedad. Porque cuando uno tiene compromisos con los trabajadores, no es un sector de la sociedad, en definitiva es un modelo de desarrollo, de país, de crecimiento, de creer en la movilidad social ascendente.
Yo decía que el mejor homenaje, que se le puede hacer a un hombre, como Norberto Centeno, es construir solidariamente un país que él imaginó. Porque quien cree en los trabajadores, quien trabaja para los obreros necesita un país grande, necesita un país con talleres, con fábricas, con industrias, con escuelas de capacitación, con escuelas técnicas, con un crecimiento de país, cada vez mayor, que agregue más y más valor porque cuanto más valor agreguen más obreros va a haber y mejores salarios éstos van a cobrar.
Muchas veces escuchamos homenajes o como se recuerda a Perón y a Evita casi como una liturgia, casi monocordemente. Pero luego esos discursos y esas palabras no encuentran una traducción concreta en las acciones cotidianas de los hombres y mujeres que tenemos responsabilidades institucionales, en cualquiera de los lugares que el voto popular o el voto de los compañeros, o la decisión, nos haya colocado.
Entonces se me ocurre que entre las primeras cosas, los primeros homenajes que podemos hacerles a hombres como Norberto Centeno están dos, la coherencia con nuestras ideas, con lo que pensamos toda nuestra vida, y el compromiso en la construcción de un país diferente.
Recordarlo a él es recordarlo con alegría, no queremos recordarlo con lágrimas, con dolor, vidas como la de él deben ser celebradas con alegría, con un compromiso por el presente y por el futuro esencialmente. A hombre como él no se los recuerda llorando, se los recuerda luchando, construyendo por el país que él quería. (Aplausos)
Aquí en este Salón histórico, Felipe Vallese, en este lugar histórico, la Confederación General del Trabajo, escenario de las luchas y de las humillaciones también que sufrió el pueblo argentino, quiso Evita que su cuerpo estuviera para siempre, no era una casualidad, era el compromiso profundo de una mujer con aquellos que sabía leales, con aquellos que sabía que jamás traicionarían la voluntad de un país soberano, justo e independiente. Por eso quiso estar aquí y por esto todos ustedes tienen que estar muy orgullosos de pertenecer la Movimiento Obrero Argentino. Tienen que cuidar este lugar que ya no es solamente de los trabajadores, es de todos los argentinos, porque es el símbolo de un país industrial, de un país pujante, de un país diferente, de un país con salarios, con educación, con salud, con obras sociales, con vacaciones con aguinaldo, es el país de la historia. (Aplausos)
En este país, nuestro país, nuestra Patria, que hoy estamos reconstruyendo con esfuerzo, con sacrificio, con tesón, tenemos que comprometernos a honrar la memoria de hombres como Norberto Centeno, y a honrar nuestra propia historia, nuestra pertenencia de ideas, nuestra pertenencia histórica, nuestra pertenencia nacional y popular. Con orgullo y en voz alta, no para enfrentar a nadie, al contrario, para unir a todos los argentinos de buena voluntad que saben que un país diferente no solamente es posible, sino que además es necesario, que no es una opción para los argentinos de bien, sino una obligación, por sus hijos y por todos aquellos que murieron para que la Argentina pudiera seguir viviendo.
Muchísimas gracias. Gracias Hugo, gracias compañeros y compañeras de la CGT, gracias trabajadores, trabajadoras. Un abrazo muy grande a la familia del doctor Roberto Centeno, lleven con orgullo siempre su memoria que es la memoria del pueblo argentino. (Aplausos)

Cristina Fernández promulgó la ley de promoción de autopartes

La Presidenta encabezó reunión por la Ley de Autopartes

Despedida a los atletas que participarán de los Juegos Olímpicos en Beijing

Cristina Fernández junto a nuestros deportistas olímpicos
viernes, 04 de julio de 2008

PALABRAS DE LA PRESIDENTA DE LA NACIÓN, CRISTINA FERNÁNDEZ DE KIRCHNER, EN LA DESPEDIDA A LOS DEPORTISTAS ARGENTINOS QUE PARTICIPARÁN DE LOS JUEGOS OLÍMPICOS DE BEIJING

Quiero decirles a tantos jóvenes que están aquí con nosotros y a ustedes, nuestros representantes en Beijing, dos cosas: una, que los admiro profundamente, y la otra es que los envidio. Quiero confesarles algo, cuando yo era muy joven como ustedes no me gustaban los deportes, no hacía deportes, leía todo el día y la verdad que si de algo me arrepiento en la vida es de no haber hecho deportes desde chica. Ahora hago gimnasia, corro, camino y hace 20 años que dejé de fumar también como una contribución a la vida sana y a la salud. (APLAUSOS)
Quiero decirles a todos los jóvenes argentinos que además de leer y estudiar hay que hacer mucho deporte porque oxigena la cabeza, porque ayuda a pensar mejor y porque además constituye lazos de solidaridad y de unidad entre quienes hacen deportes.
Quiero decirles a ustedes, a vos Manu, a todos los chicos que van a competir, que cuando estén allá piensen mucho en nosotros, que desde acá vamos a estar haciendo mucha fuerza por ustedes, por la Argentina, por las cosas que nos representan como nos representan ustedes, con calidad, con idoneidad, con esfuerzo, con trabajo y con sacrificio. Porque han llegado a donde han llegado porque se han sacrificado, porque entrenan todos los días, porque por ahí cuando no tienen ganas de hacerlo saben que tienen que cumplir con la rutina, van, corren, esfuerzo, trabajo; porque se cuidan en las comidas, porque hacen toda una vida de sacrificio, sacrificio para ser mejores y sacrifico para representarnos a nosotros, a todos los argentinos.
Así que mucha fuerza, mucha fe en ustedes mismos y en todos nosotros que desde aquí, desde la República Argentina, vamos a estar haciendo como siempre lo hacemos el aguante. Fuerza y vamos Argentina rumbo a Beijing, con fe, con coraje y con fuerza. Adelante. Gracias. (APLAUSOS)

Palabras de la Presidenta en acto de firma de convenio de viviendas

La presidenta Cristina Fernández con representantes de las Fuerzas Armadas, la ministra de Defensa, Nilda Garré y el gobernador bonaerense, Daniel Scioli, en el acto por la firma de un convenio para la construcción de viviendas para integrantes de las fuerzas.
jueves, 03 de julio de 2008

PALABRAS DE LA PRESIDENTA DE LA NACIÓN, DRA. CRISTINA FERNÁNDEZ DE KIRCHNER, DURANTE EL ACTO DE FIRMA DE UN ACUERDO MARCO PARA POLITICA HABITACIONAL DEL PERSONAL DE LAS FUERZAS ARMADAS, EN CAMPO DE MAYO.

Muy buenas tardes a todos y a todas; señores Gobernadores; señores Comandantes de las tres Fuerzas; señores ministros; señores oficiales y señoras suboficiales y oficiales de nuestras Fuerzas Armadas: es para nosotros realmente un momento muy especial el poder firmar este acuerdo, que va a significar, para muchos de ustedes, el cumplimiento del sueño que todo ciudadano, que todo hombre o mujer tiene de poseer su casa propia.
Cuando pensamos en una reformulación del Plan Federal I y II de Viviendas, ustedes saben que si bien se construyen con recursos nacionales, son las provincias las que licitan, ejecutan, controlan y adjudican las obras. Por eso la presencia y la conformidad de los señores Gobernadores a participar en el diseño de este plan, de modo tal de integrar también, específicamente, a los suboficiales de las Fuerzas Armadas en este plan, que es muy importante.
Para mí me remite a épocas, de hace más de 20 años, cuando por primera vez, en la municipalidad de Río Gallegos, comenzamos a realizar tareas conjuntas con el Ejército Argentino, en el entonces Regimiento 24. Se debe acordar José López, se debe acordar Julio, donde ni siquiera entraban los camiones de basura a hacer la recolección dentro de los regimientos y comenzamos con esta primera tarea de incorporar a la trama urbana, a la vida conjunta de una ciudad, en una cosa tan cotidiana, tan humana, tan de los vecinos, como es la recolección de residuos. Después vinieron obras conjuntas en playones deportivos, acuerdos para lograr recuperar tierras para la ciudad, ya que como sucede en muchísimas ciudades de nuestro país profundo, las unidades militares, que primero estaban en la Patagonia, casi desierta, terminaron estando en el medio de cada ciudad. Y fue necesario revisar convenios para poder tener tierras para poder seguir expandiendo los ejidos urbanos.
Y luego recuerdo, la última etapa, donde me tocó entregar también viviendas, construidas por el Estado provincial, para suboficiales de nuestras Fuerzas Armadas, incorporados definitivamente a la vida allá en Río Gallegos, se quedaban a vivir y entonces comenzamos a construir viviendas. Esta idea de la participación de los hombres y mujeres que ha decidido vestir uniforme en la planificación de un Estado, en ese caso del Estado provincial, y hoy en la planificación del Estado Nacional es una decisión y también una convicción: la necesidad de todos, civiles y militares de concebirnos como lo que somos, una misma y única comunidad, con las mismas demandas, con las mismas necesidad, con las mismas ilusiones, con los mismos anhelos.
Y realmente encomendé, entonces, al secretario de Obras Públicas para que comenzara a trabajar jurisdicción por jurisdicción para lograr cubrir las necesidades. Lo cierto es que sobre 14 mil inscriptos, con este plan estamos dando respuestas al 50 por ciento de las demandas; sabemos que quedó otro 50 por ciento y vamos a trabajar fuertemente, muy fuertemente en todo lo que es el Plan Federal II y todos los planes que vamos a elaborar para realmente terminar de dar respuestas a toda la comunidad. Porque, en definitiva, también dando respuestas a las demandas de nuestros suboficiales, que necesitan casas para vivir, estamos satisfaciendo las necesidades de la comunidad.
También recién comentábamos con el señor Ministro de Planificación Federal, la necesidad de abordar un plan, que contemple las necesidades de los oficiales, porque sabemos que muchas veces no ingresan en la planificación de lo que se denomina la banca privada y, por lo tanto, es perfectamente posible hacerlo a través de una planificación en la banca estatal.
Estamos trabajando en una planificación para viviendas, donde ya no sean de un perfil solamente social, sino que, tal vez, con un poder adquisitivo un poquito mayor, puedan acceder también sectores medios de nuestra sociedad y también nuestros oficiales.
Creemos que estamos dando respuesta a una demanda por todos sentida y contribuyendo también a mejorar la calidad de vida de todo el pueblo argentino.
Siempre digo que me gustaría vivir en un país, donde cada uno que trabajara y cobrara un salario, un sueldo, una asignación tuviera la posibilidad porque ese ingreso fuera lo suficientemente bueno para poder construir él su propia casa.
Pero todavía falta para llegar a un país como ese y, en el mientras tanto llegamos a ese país, el Estado debe asumir su rol indelegable de hacer frente a las demandas de vivienda, de seguridad, de salud y de educación para todos sus ciudadanos.
Hoy estamos aquí no haciendo ninguna concepción ni ningún gesto magnánimo, ni por el contrario ningún favor tampoco, simplemente comenzando a cumplir lo que es el deber del Estado, de la gestión de Gobierno de hacerse cargo de las demandas y de las necesidades de todos sus ciudadanos, sin distinción de ninguna naturaleza, porque eso es lo que caracteriza, vitaliza a una sociedad democrática: saber que todos somos iguales, pero no solamente porque lo plantee un artículo de la Constitución, sino porque también somos tratados todos en forma igualitaria.
Una sociedad más democrática, una sociedad más igualitaria en la que todos los argentinos nos sintamos, por sobre todas las cosas, eso, argentinos independientemente del rol, de la profesión que cada uno cumple, que ha elegido como vocación, como deber, como destino, es el país en el que todos y todas aspiramos a vivir; desde ustedes, oficiales, suboficiales de las Fuerzas Armadas, hasta cualquier otro ciudadano de nuestro país. El mismo país que quiero yo como Presidenta de todos los argentinos.
Por eso es que quise venir a compartir esta tarde aquí, en la Escuela de Suboficiales Sargento Cabral, ese gran soldado que ingresó en la historia cumpliendo su deber, junto a ustedes para compartir este momento y agradecerles a todos los que han participado en el diseño y en el trabajo de este plan, de este acuerdo que hoy estamos aquí firmando, a los señores Comandantes de las tres Fuerzas y también a quienes son Comandantes en Jefe de la totalidad de las Fuerzas, a los señores gobernadores que enseguida que fueron participados de esta idea, de esta planificación, sin dudarlo se pusieron a trabajar junto a nosotros para poder arribar a esto, que hoy estamos firmando, y que contempla, reitero, el 50 por ciento de las demandas. Todavía estamos en deuda, falta el otro 50 por ciento y por ese otro 50 por ciento vamos a ir y ya estamos trabajando.
Tengan ustedes muy buenas tardes, muchas gracias por estar aquí, perdonen un poco la demora, fue producto de la niebla y de la accidentología de los accesos a esta Escuela, quería compartir con ustedes este momento que seguramente para muchos va a significar el comienzo de una nueva etapa, el contar con la posibilidad de techo propio.
Muchas gracias y muy buenas tardes. (APLAUSOS)